Expresionismo Abstracto y Música de películas
El otro día, cuando escribía mi pequeña persepción acerca de la visita a la Bauhaus me encontré con una reseña que me gusto mucho acerca de Vasili Kandinski quien siempre fue mi preferido de los artistas modernos
Expresionismo Abstracto
1943–1965
El artista moderno trabaja con el espacio y el tiempo, y expresa sus sentimientos en lugar de ilustrar.
El expresionismo abstracto fue ese movimiento pictórico dentro de la abstracción posterior a la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto. Tras estos terribles acontecimientos siguió un periodo de lógica incertidumbre y de cuestionamiento de la moral humana.
Esto da como resultado la proliferación de obras de arte que incluían formas de creación desgarradas en las que quedaba a un lado el goce estético tal y como se entendía hasta entonces. Un desencanto por lo colectivo dio como resultado obras muy personales.
Se considera el primer movimiento genuinamente estadounidense y se dice por ello que incluso fue directamente financiado por la CIA en el contexto de la Guerra Fría. Estados Unidos (Nueva York en realidad) había sustituido a París como capital artística y los expresionistas abstractos cogieron el testigo de la vanguardia. El país, líder ahora del mundo libre, necesitaba un arte propio que liderara el arte occidental. Y qué mejor que un arte individual cuya principal característica es la libertad.
Los expresionistas abstractos fueron unos tipos (y tipas) fascinados por la soledad y el proceso. Individualistas, decidieron mostrar el carácter expresivo del arte investigando en búsquedas personales, más que colectivas. El artista desalentado por su contexto político y social se refugia ahora en su interior y abandona toda referencia externa. Se valora por tanto el gesto, una especie de huella dactilar del artista, porque es algo único de cada uno.
Se potencia también la materialidad del cuadro y convierten el proceso artístico casi en un rito religioso, siendo la pintura la prueba documental del mismo. La improvisación formaba parte de este trance casi místico, en el que el artista entraba en contacto directo con sí mismo. Este automatismo podría derivar del surrealismo, que aún estaba vivo en esos años.
Si este artista dice frases celebres como: “Todos los procedimientos son sagrados si son interiormente necesarios. Todos los procedimientos son pecados si no se justifican por la necesidad interior.” o “La armonía de los colores debe fundarse únicamente en el principio del contacto adecuado con el alma humana, es decir, en lo que llamaremos el principio de la necesidad interior”, claramente nos dice que para él el arte es algo muy diferente a lo que continuó el pensamiento científico de la Bauhaus y que, pienso que cree como yo, que el excesivo auto-analisis aniquila la ensencia.
Es la musicalidad en la obra de Kandinski lo que me dejó en absoluto estado meditativo (y danzante) al contemplarla por primera vez. Que una imágen por sí misma me transmita sonidos, sensaciones, emociones, recuerdos, despertando así los procesos creativos de mi propia alma y dándoles piedras y hormigon para contruir lo que ésta necesitase expresar en ese momento, me demuestra que inclusive en esa época habían discuciones acerca de este tema que derivan en diferentes corrientes, como lo hace la influencia de Kandinski al decantar en la “Abstracción lírica” y “Expresionismo abstracto”.
La música es para mí el más elevado de todos los artes. Cuando la veo caminando por la calle, a la salida del teatro, agarrada del brazo a su hermana “la película” sencillamente necesito tomarme un avión y escapar a otro país. Ver a la imágen, esa gran esfinge que no comprendo, en companía de la música es para mí el más alto de todos los artes. Siempre recuerdo esos tiempos de pintura solitaria en mi taller, en expresionismo abstracto, en companía de la música clásica contemporánea, en servicio al cine. Durante muchos años, en especial cuando aparecio winamp, despues los portatiles como el ipod y cada uno podia descargarse y guardar su propia música, solamente escuché música de películas que bajaba de internet o me pasaban algunos amigos en Cds. Escuchaba mientras pintaba a Hans Zimmer y vi aparecer a Max Richter (a quien por fin pude ver en vivo en el año 2023), a Max Steiner, a Howard Shore y John Williams. Por las noches, con mi hermano más chico, escuchabamos el disco del Fantasma de la opera a todo volúmen, él se volvería un fanático de Howard Shore por El Señor de los anillos y aprendería a tocar el violín mientras yo pintaba en el patio trasero los primeros cuadros de Ciudad Automática de Buenos Aires.
En los tiempos adolescentes escuchaba tb Limp Bizkit, Pink Floyd, Babasonicos, Abba, Christina Aguilera (Uf, disco para la película de Mulan), y bueno, bailaba cuarteto con mis amigas y familia. Acababan de pasar los tiempos de Gilda y se escuchaba Damas Gratis, pero prefería a Rodrigo, aunque eso ocurría en las abundantes salidas sociales a las que me sentía siempre un poco en obligación de asistir. El asunto es que al tener 3 hermanas mayores involucradas con la música escuché tambien mucho de los 80 como música cotidiana, Depeche Mode, In Excess, Tears for fears, Soda Estereo, Los abuelos de la nada, los Autotentico decadentes, Vilma Palma y alguno más. Al grueso del Rock nacional no lo conocí por mi familia, que era muy purista, sino por mis amigos del barrio. Me confirmaba, la desazón de mi madre de que siempre me encontraba nuevas amistades de las menos esperadas, que algo iba por buen camino. Esas amistades me llevaron entre miles de cosas a Santana, a Steven Wilson, mi hermoso Maxi me llevo hasta Dream Theater (¡Esos discos!) y por mi cuenta fui buscando a Mercedes Sosa, Espineta, Sandro, y, por el barrio de Balvanera llegué al Tango argentino. Después elegí cosas preferidas como Lisandro Aristimuño, Natalia Lafourcade y Cerati. Gracias Argentina por esos 10 años (2008-2018).
Y volviendo al Expresionisma Abstracto, recuerdo que así como la primera vez que escuché un disco entero de Max Richter mirando, tan simplemente, por la ventana los movimientos del arbol y escuchando con total entrega, de la misma manera me impactó cuando estudiando en el profesorado de artes visuales vi pasar, meramente pasar, una obra del expresionista Kirchner. Lo que sea que vio mi mirada en ese grabado blanco y negro, xilografía, quemó como ácido mi retirna para siempre. Fue por ésto que al llegar a Berlín en el año 2020 y ver a mi pintura naturalmente virar hacia ese recuerdo, decidí quedarme. Quizás podría con el tiempo conocer más de cerca a este grupo de artistas.
The style originated principally in Germany and Austria. There were groups of expressionist painters, including Der Blaue Reiter and Die Brücke. Der Blaue Reiter (The Blue Rider, named after a painting) was based in Munich and Die Brücke (The Bridge) was originally based in Dresden (some members moved to Berlin). Die Brücke was active for a longer period than Der Blaue Reiter, which was only together for a year (1912). The Expressionists were influenced by artists and sources including Edvard Munch, Vincent van Gogh and African art.[21] They were also aware of the work being done by the Fauves in Paris, who influenced Expressionism’s tendency toward arbitrary colours and jarring compositions. In reaction and opposition to French Impressionism, which emphasized the rendering of the visual appearance of objects, Expressionist artists sought to portray emotions and subjective interpretations. It was not important to reproduce an aesthetically pleasing impression of the artistic subject matter, they felt, but rather to represent vivid emotional reactions by powerful colours and dynamic compositions. Kandinsky, the main artist of Der Blaue Reiter, believed that with simple colours and shapes the spectator could perceive the moods and feelings in the paintings, a theory that encouraged him towards increased abstraction.[5]
Nací en el Expresionismo Abstracto, soy un ser humane milennial del 88. Los artistas argentinos viajaban a NY o a París o a Madrid a vender sus obras expresionistas. Caminos individuales, búsquedas profundas. Visité muchos talleres y entablé amistades desde pequeña edad. En la medida en la que fui creciendo también encontré a los muralistas socialistas de américa latina, como así también a los autores de fantasías de mural post 2010. Conocí muchos mundos que trabajaban la imágen. A mí me atrae el expresionismo y mi museo preferido es Der Brucke, en Berlin, no solo por la colección que pueda tener, sino porque sigue vigente en sus exhibiciones la relectura de la realidad contemporánea, la crítica social, la ficción de los sentidos, la musicalidad y lo rudimentario del quehacer artístico.